Independiente Medellín entró al campo con la imperiosa necesidad de asegurar una victoria frente a Defensa y Justicia para mantener viva su esperanza en el Grupo A de la Copa Sudamericana. Contra todo pronóstico, el conjunto colombiano exhibió un juego contundente que le permitió imponerse 2-1. Desde los primeros instantes, los pupilos de Alfredo Arias impusieron su estilo, siendo Brayan León Muñiz el encargado de abrir el marcador de forma temprana, capitalizando un cabezazo en el área tras un centro magistral de Jhon Vásquez.
La determinación del Medellín se reflejó en su capacidad para mantener la ventaja a lo largo del encuentro, manteniendo a raya a Defensa y frustrando sus intentos por igualar el marcador en la primera mitad. La seguridad defensiva del equipo local permitió administrar la ventaja obtenida, limitando las oportunidades de peligro del conjunto argentino.
La confianza del Medellín se vio reforzada con el segundo gol, obra de Miguel Monsalve, quien aprovechó una brillante combinación de juego que nuevamente involucró a León Muñiz. Aunque el ímpetu argentino se intensificó en la segunda mitad en busca de una remontada, la defensa sólida del Medellín frustró sus intentos hasta que Nicolás Palavecino, recién ingresado, logró descontar para Defensa y Justicia.
El tanto argentino avivó las llamas de la esperanza en el equipo visitante, generando una presión constante sobre el Medellín en los minutos finales. A pesar de perder cierto impulso ofensivo con las salidas de Muñiz y Monsalve, el Medellín se aferró a su mínima ventaja hasta el pitido final, asegurando una valiosa victoria que les coloca en la segunda posición del grupo, detrás del líder Always Ready.