Las masivas manifestaciones que se presentaron en las calles de todo el país, provocaron diversas recciones entre líderes políticos y ciudadanos, reflejando la polarización que existe hoy en el panorama nacional.
El ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, en un tono reflexivo, señaló que estas protestas marcan un hito para el Gobierno, instando a la autorreflexión, a la autocrítica y al diálogo como vías para abordar las demandas ciudadanas.
Por su parte, el senador Humberto de la Calle hizo un llamado a Petro para que tome en cuenta este clamor popular y adopte un enfoque menos confrontacional en su gestión.
El exalcalde de Medellín, Daniel Quintero Calle, despreció las protestas, insinuando que sus participantes eran cómplices de administraciones asociadas con un aumento en la violencia sexual, una declaración que generó controversia y rechazo.
“Veo más sensatez de los ministros, que del propio presidente Gustavo Petro. Mientras sus colaboradores dicen que esta semana debe ser de ‘reflexión y autocritica’, el mandatario señala que lo que quieren es ‘tumbar un gobierno popular y matar al presidente’”, indicó a En Tertulia, el dirigente cívico, Mario de J Valderrama.
El presidente de la República, Gustavo Petro, les pidió a sus seguidores que la marcha del próximo 1 de mayo, Día del Trabajo, se convierta en una contramanifestación a las marchas presentadas este domingo.
Planea liderar la marcha en Bogotá, se espera que el gobierno movilice a diversos grupos, incluidos indígenas, desmovilizados, maestros y trabajadores, en un esfuerzo por contrarrestar el mensaje de las marchas dominicales.
