Esta prueba consiste en la instalación de una señal ética que demarca los espacios preferenciales para las personas con discapacidad física usuarias de silla de ruedas.
Este piloto es el resultado de un proceso de diseño participativo realizado por el Metro con personas con discapacidad y el acompañamiento de una empresa de diseño accesible con el fin de generar conciencia sobre la importancia de respetar los espacios preferenciales demarcados, potenciando la Cultura Metro.
La marcación se encuentra en las plataformas de las estaciones Niquía, Bello, Tricentenario, Hospital, Prado, San Antonio, Exposiciones, Industriales, Poblado, Itagüí y en 10 de los trenes que circulan en la línea A.
El Piloto comprende una serie de activaciones con representantes de los colectivos y personas con discapacidad que participaron en la cocreación de la prueba y guías educativos del Metro.