En el corregimiento de Manzanillo, en el municipio de Itagüí, fue inaugurada una obra de infraestructura educativa que beneficiará a 1,150 estudiantes de las ocho veredas del sur del Valle de Aburrá.
La Institución Educativa María Josefa Escobar, que anteriormente contaba con 19 aulas, ha expandido su capacidad a 31, mejorando no solo los espacios para niños y jóvenes, sino también fortaleciendo la cobertura y calidad educativa en la zona rural a través de la implementación de la jornada única.
«Nos emociona hacer parte de este sueño de la comunidad del corregimiento de Manzanillo. Ver la alegría de todos los niños y niñas ratifica que vale la pena trabajar en equipo para transformar los territorios y la calidad de vida de la gente. Esta es una obra con más y mejores espacios que, sin duda, traerán nuevas oportunidades de formación para los estudiantes y será además un lugar de encuentro para las familias», expresó Paula Andrea Palacio Salazar, directora del Área Metropolitana del Valle de Aburrá.
La moderna infraestructura incluye nuevos salones, un auditorio con capacidad para 220 personas, una placa polideportiva cubierta con camerinos y baños, salones para la práctica de deportes de combate, zonas de estudio, biblioteca, ludoteca, y una terraza para el esparcimiento. Además, se abrirá un centro familiar que brindará atención psicosocial y jurídica gratuita para toda la comunidad del corregimiento.
«No solo estamos entregando modernos colegios, estamos mejorando la calidad de vida de los niños y sus familias con espacios dignos. Lo más importante es que estamos implementando la jornada única en esta institución educativa, garantizando el programa de alimentación escolar para el 100% de los estudiantes», destacó Diego Torres, alcalde de Itagüí.
Con esta nueva infraestructura, se espera incrementar el número de estudiantes, ampliando así la cobertura educativa en la región.