El expresidente Álvaro Uribe Vélez defendió este viernes la Operación Orión, un operativo militar realizado en 2002 en la Comuna 13 de Medellín durante su gobierno, en el que participaron centenares de soldados, policías y fuerzas especiales para recuperar el control de la zona. Este operativo, que marcó un antes y un después en la lucha contra los grupos armados ilegales en la ciudad, sigue siendo objeto de críticas por presuntas extralimitaciones y violaciones a los derechos humanos.
Uribe afirmó que la operación se desarrolló dentro del marco de la ley y que las víctimas encontradas en La Escombrera, una zona donde se presume que fueron arrojados cadáveres, son mayoritariamente de personas asesinadas por el ELN, las Farc y bandas criminales que dominaban la comuna antes de su gobierno. En este sentido, el exmandatario denunció lo que considera un sesgo de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) contra los militares y su administración.
“Como todo lo de los gobiernos petro-santistas, en la JEP prima la indulgencia con los terroristas y el sesgo contra los militares y el gobierno que presidí”, declaró Uribe, quien también señaló que se está haciendo política con las víctimas del conflicto, en lugar de buscar la justicia de manera imparcial.
El expresidente destacó que la intervención permitió recuperar la seguridad en la Comuna 13, lo que, según él, impulsó el turismo y la inversión social en la zona. “Turistas del mundo; el arte que aquí los recibe estuvo anulado por la mordaza terrorista. Por eso la Operación Orión. Honor a los soldados y policías. Quiero a los soldados de Colombia, que nunca han sido beneficiarios de impunidad. Que se haga justicia, pero no que se haga política con la justicia”, agregó.
Uribe recordó la grave crisis humanitaria que enfrentaba la Comuna 13 antes de la operación, con desplazamientos masivos, homicidios y secuestros cometidos por guerrillas y paramilitares. Según el exmandatario, en los cinco años previos a Orión se registraron más de 15.000 homicidios en Medellín, cifra que se redujo drásticamente tras el operativo.
El exgobernante también cuestionó el enfoque del gobierno actual y la JEP al abordar este capítulo de la historia reciente. “Están haciendo política con las víctimas de la Escombrera, cuando la comunidad sabe que los grupos delincuenciales arrojaban cadáveres allí desde hace décadas”, afirmó.
A pesar de las críticas, Uribe subrayó los logros alcanzados en la Comuna 13 tras la operación. “Hoy, la Comuna 13 es un centro de arte, cultura y turismo que recibe más de un millón de visitantes al año. Pasamos de un infierno urbano a un punto mundial de referencia. Esa transformación es el resultado de políticas de seguridad, inversión y cohesión social implementadas durante mi gobierno”, enfatizó.
El expresidente aprovechó para reflexionar sobre el panorama de seguridad actual en el país, advirtiendo sobre el resurgimiento de la criminalidad en varias regiones. Según Uribe, es fundamental corregir el rumbo para evitar que otras zonas de Colombia enfrenten situaciones similares a las que vivió la Comuna 13 antes de 2002.
“Debemos asegurar que Colombia tenga seguridad, alegría, inversión y bienestar social. Las elecciones son una oportunidad para corregir el rumbo y evitar que más municipios se conviertan en nuevas Escombreras”, dijo.
El líder del Centro Democrático reiteró su respaldo a las Fuerzas Militares y a las familias que se beneficiaron de la Operación Orión, asegurando que su gobierno siempre actuó en busca de la verdad y la justicia.
La Operación Orión sigue siendo un tema divisivo en la opinión pública, con defensores que la consideran un hito en la recuperación de la seguridad en Medellín y críticos que cuestionan las posibles violaciones a los derechos humanos cometidas durante su ejecución. Mientras tanto, el debate sobre la justicia transicional y el papel de la JEP continúa generando controversia en el país.