El Ministerio de Igualdad anunció la salida del viceministro Dumar Guevara luego de que se conocieran mensajes en los que utilizaba expresiones ofensivas contra familiares del presidente Gustavo Petro. La decisión se hizo pública pocos días después de que se revelaran estas comunicaciones, que además se sumaban a cuestionamientos por su presunta participación en irregularidades relacionadas con un contrato que superaría los $55.000 millones.
El ministro Juan Carlos Florián confirmó que Guevara dejó su cargo tras solicitarle la renuncia, asegurando que el funcionario ya no hace parte de la entidad. Florián también defendió la ejecución presupuestal del ministerio, aclarando que se encuentra en 33 %, pese a denuncias recientes que apuntaban a un porcentaje mucho menor. El caso tomó fuerza no solo por los insultos filtrados, sino también por la influencia que, según los chats divulgados, el viceministro habría intentado ejercer dentro de la entidad.
Los mensajes revelados mostraban cómo Guevara habría obstaculizado reuniones entre Andrea Petro, hija del presidente, y su madre, Mary Luz Herrán, con funcionarios del Ministerio de Igualdad. Las conversaciones, marcadas por expresiones ofensivas hacia ambas, describían maniobras del entonces viceministro para evitar dichos encuentros y para imponer control sobre la agenda interna de la institución.
En declaraciones posteriores, Herrán aseguró que el comportamiento de Guevara cambió cuando empezó a acercarse a espacios de poder y que su hija tomó distancia de él por actitudes que no consideraba adecuadas. También trascendió que el propio presidente habría solicitado la salida del funcionario tras conocer el contenido de los mensajes. Rumores apuntan incluso a que la permanencia del ministro Florián podría verse comprometida, en medio de la crisis institucional que atraviesa la cartera.
A este panorama se suma la incertidumbre por el futuro del Ministerio de Igualdad. La Corte Constitucional había declarado irregular su creación y dio un plazo al Gobierno para corregir el procedimiento. No obstante, la iniciativa legislativa para respaldar nuevamente la existencia de la entidad no avanza y podría hundirse por falta de apoyo político. Aunque la discusión cuenta con mensaje de urgencia, los tiempos en el Congreso son limitados y no está claro si el Gobierno logrará las mayorías necesarias antes de que se cumpla el plazo señalado por la Corte.











