El presidente Gustavo Petro Urrego, se vio forzado a imponer el presupuesto general de la nación, para la vigencia 2025, por decreto, luego de perder el pulso en el Congreso de la República. Así lo confirmó el propio mandatario al publicar en sus redes sociales: “Se decreta el presupuesto que el gobierno inicialmente presentó al Congreso”.
El monto establecido asciende a 523 billones de pesos, según lo anunciado por el ministro de Hacienda. Sin embargo, en el parlamento existen discrepancias con esta cifra, y varios legisladores han expresado su rechazo.
Uno de los puntos más controversiales es la inclusión de la reforma tributaria por 12 billones de pesos, la cual está en el limbo. El presidente del Senado, Efraín Cepeda, señaló que “los 12 billones de pesos de la ley de financiamiento no se pueden incluir en un decreto; hoy en ese decreto no estará eso, ni las normas especiales”.
Por su parte, la representante Katherine Miranda criticó duramente la medida, calificando el proyecto de “irresponsable, antitécnico y cero riguroso”. Con estas tensiones, el futuro de la financiación del país sigue siendo incierto.
