El escándalo de corrupción en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) sigue creciendo, con nuevos nombres involucrados que salen cada día a la luz pública.
Ni Olmedo López, ni Sneyder Pinilla, ni el contratista Luis Eduardo López aceptaron cargos, tal como estaba previsto, ya que esperan definiciones sobre la forma en que se les atenderán sus peticiones de colaboración con la justicia.
La Fiscalía confirmó que Carlos Ramón González, director Nacional de Inteligencia, habría ordenado pagar sobornos por más de $4.000 millones a Iván Name y Andrés Calle. Ayer se conocieron tres nuevos nombres de políticos salpicados por este escándalo: Camilo Romero, embajador en Argentina; Germán Rogelio Rozo, representante del Partido Liberal; y Julio Elías Chagüi, senador del Partido de la U.
El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, también fue mencionado ayer por la Fiscalía. Según la fiscal del caso, Olmedo López coordinó con Sneyder Pinilla y el ministro de Hacienda el direccionamiento de contratos en los cuales estaban interesados los senadores y representantes de la Comisión Tercera del Congreso de la República.
La Fiscalía tiene lista la imputación de cargos contra Sandra Ortiz, exconsejera para las regiones, quien habría sido la mensajera de sobornos por $3.000 millones para Iván Name. Este caso continúa desarrollándose, con más implicados y detalles emergiendo, poniendo en evidencia la magnitud de la corrupción en la UNGRD.
